En Dios es posible hacer todas las cosas nuevas. Cuántas situaciones o costumbres hay que están arraigadas en nuestras vidas, y no sabemos cómo deshacernos de ellas? pero en Cristo, realmente un cambio verdadero para bien es posible. Muchas veces queremos hacerlo por nuestras propias fuerzas, pero debemos entender que no es con nuestras fuerzas que lograremos el cambio, sino con el poder del Espíritu Santo que vive en nosotros que lo lograremos. Porque todo lo podemos en Cristo que nos fortalece, es Dios quien nos da la voluntad para hacer o deshacer, es el Señor quien nos da la fuerza necesaria para no ceder ante la tentación de volver a patrones antiguos que solo traían destrucción a nuestras vidas. Po ello, ante un cambio en nuestras vidas, es bueno que nos pongamos en manos del Señor, porque El nos dice que se hace fuerte en nuestra debilidad. Si nos ponemos en Sus manos, El hará que nuestra área débil sea fuerte, e incluso ya superado aquello, puede usarlo Dios para que demos testimonio a otras personas que están pasando la mismo situación, y enseñarles que de la mano de Dios todo es posible. El Señor puede ayudarnos, para El no hay imposibles, y toda atadura que satanás haya traído a nuestras vidas, puede ser roto en el nombre de Jesús.
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